domingo, septiembre 09, 2007

MONTAÑANA - PEÑAFLOR : ESPERANDO AL ACCIDENTE PARA ACTUAR

Constantemente hablo de la precaria situación del 25. Parece que el castigo que tiene el Ayuntamiento con este barrio continuará, porque parece que los nuevos autobuses que vendrán en breve, tampoco irán asignados al desdoblamiento, o mejor dicho, destriplicamiento de la 25.
Pero hoy voy a hacer referencia a la situación del corredor de Montañana - Peñaflor. Es una salida de la ciudad hacia estos barrios rurales. El 28, con sus 22 minutos de frecuencia de paso entre semana y hasta media hora, según el horario oficial, en fines de semana, recorre desde el límite de la ciudad, en las proximidades del río Gállego, 12 kilómetros de carretera hasta llegar a Peñaflor. Una carretera que en sus laterales, tiene infinidad de edificación dispersa. La densidad de población es muy baja, e incluso se acentúa por que bastantes viviendas que allí se encuentran, son de fin de semana o verano, que es cuando el autobús disminuye la frecuencia de paso. Para solventar los graves problemas de no respeto de horario, los barrios consiguieron la "lanzadera" (a mi me gusta llamarlo mejor servicio corto) 128, que funciona en días laborables y sábados. Parece que este servicio ha solventado los problemas.

Pero el más grave persiste. Llevan años reclamando marquesinas que el Ayuntamiento promete pero nunca llegan. La carretera, con tramos donde se circula a velocidad máxima de 70, y otros a 100 kms/hora tiene paradas en precario.
En este tramo, velocidad máxima 100 Kms/h
Un simple poste, sin espacio para esperar el autobús, sin resguardo del aire, sol, frío o lluvia y un tráfico de alta velocidad hacen de las paradas un entorno de alto peligro. En la foto, como se ve, la parada está puesta en la salida de un camino.
Ante la falta de marquesinas, los residentes han optado por buscarse la vida, y de forma esperpéntica dotan a las paradas de asientos para poder esperar al autobús sentados.
En este tramo, velocidad máxima 70 Kms/h
Además, siendo que se trata de gente mayor, el carecer de una acera hace que la subida al bus sea más difícil. Incluso la 25 tiene ya solventado el problema de las paradas en la carretera, yendo el autobús por una vía de servicio. Y sino, la espera continúa en el arcén hasta que algún día, un accidente haga que nuestro ayuntamiento tome cartas en el asunto.
En este tramo, velocidad máxima 70 Kms/h
El accidente es la única solución, por macabro que pueda sonar... ¿qué tipo de Ayuntamiento tenemos que solo actúa cuando muere gente? Desde luego, no uno que vele por el interés de sus ciudadanos.

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