La ciudad crece, pero las infraestructuras no lo hacen al mismo ritmo. Además de la insensatez de no abrir el último tramo del 3er Cinturón hasta después de la EXPO, anunciado esta semana pasada, hay que unir el paupérrimo plan de movilidad presentado el año pasado, que ya ha quedado obsoleto, pues el parcheo constante al que nos tienen acostumbrados desde el Ayuntamiento, se separa de lo especificado en el mismo.
Ahora Dueso nos informa que van a empezar las zonas 30 en unas calles muy concretas de la ciudad (entorno de Pza. de Los Sitios y Leon XIII). Curiosamente en el entorno de Los Sitios, no creo que haya mucho coche que pueda circular a una velocidad superior... En Hora punta, la zona está atascada y si se mueven a más de 10 kms hora ya va bien... Pero todo sea por contentar a unos pocos y gastar sin más sustancia el dinero público...
Mientras tanto, los usuarios del 28 siguen sin marquesinas, esperando el autobús a pie de carretera, sin ni siquiera una miserable acera... Los vecinos de la Cartuja siguen sufriendo las malas frecuencias del 25, al que se le incorpora un autobús en fines de semana... Miralbueno sigue sitiado por obras. Rosales del Canal todavía sin obras de conexión a la N-IIa. Sta. Isabel sigue saturada de tráfico y una segunda vía de conexión con Zaragoza reflejada en las obras del 4º Cinturón parece no ser prioritaria... La rotonda de la MAZ sigue causando retenciones injustificables. El 4º Cinturón ( y no solo cuando los madrileños tienen fiesta) se paraliza en horas punta. Recientemente, las obras del cercanías, están generando problemas de tráfico en la plaza de la Ciudadanía y su entorno.
Por contra, los miles de autobuses que se suponían iban a saturar los accesos a la ciudad, parece que no están causando tantos problemas... pero como en esta ciudad vivimos en esta crisis "findelmundista" originada por ciertos sectores de la política, los ciudadanos somos víctimas de un proceso de transición demasiado largo e injustificable.
Por eso, otorgo el SUSPENSO a la movilidad de esta ciudad. Es cierto que ciertos temas corresponden al Ministerio de Fomento, pero soy de la opinión que el mismo Ayuntamiento tiene que exigir a Fomento la agilidad de las obras.
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