SIN SUBVENCIÓN, EL TRANSPORTE PÚBLICO POR CARRETERA EN TERUEL DESAPARECERÍA

Heraldo publica hoy un artículo donde deja claro que casi el 90% de las líneas regulares de autobús en la provincia necesita ayuda pública para subsistir.

La inmensa mayoría de las líneas regulares de autobuses que surcan la provincia de Teruel son deficitarias y necesitan de la ayuda pública para mantenerse. La escasa población de la mayoría de las localidades -solo cuatro de los 268 municipios tienen más de 5.000 habitantes- y el uso cada vez más extendido del coche particular hacen que el nivel de ocupación de muchos de los vehículos, principalmente en el medio rural, sea mínimo. Son para estas ocasiones, que deben utilizarse las subvenciones.

De las 40 líneas de transporte regular que existen, 35, es decir, el 87,5%, reciben anualmente subvención del Gobierno aragonés. Su funcionamiento es necesario como servicio público y por ello el Ejecutivo autónomo aporta una cantidad de dinero que les permite subsistir. En total, cada año la DGA destina en torno a un millón de euros a la financiación de estas líneas que no resultan rentables a las empresas de transporte. Y creo que es lo correcto.

La mayor parte de las ayudas van a parar al medio rural, pero también hay líneas entre ciudades más grandes, como la Teruel-Barcelona o el servicio directo entre Teruel y Madrid -considerado 'de interés especial'-, que igualmente tienen que recibir subvención cada año: en torno a 78.000 euros la primera y cerca de 100.000 euros el segundo. Solo cinco trayectos no figuran en el listado de líneas subvencionadas por la DGA y son Teruel-Alcañiz, Alcañiz-Zaragoza, Teruel-Valencia, Teruel-Madrid y Teruel-Zaragoza. Lógicamente, y supongo que sobretodo serán rentables el fin de semana, para que aquellos que trabajan en las grandes ciudades, retornen a su hogar.

Lo que me parece curioso es que siendo la ocupación tan baja, no se implante autobuses más pequeños. Por lo general, se ven en las estaciones de autobuses, vehículos de 55 plazas en vez de microbuses. Otras comunidades han optado por un servicio a demanda, donde los usuarios solicitan con antelación el autobús. Si los autobuses van vacíos, quizás el servicio no se adecua a las necesidades de la población, bien sea por recorrido, por horario o por cualquier otra razón. Escuchar a los usuarios siempre es bueno. Pero si no hay usuarios planeados... siempre es preferible dejar el autobús en el garaje antes de que vaya vacío. Sinceramente creo que el servicio a demanda, ahorraría costes y al mismo tiempo, sería más flexible para los usuarios.

Sea como fuere, el servicio ha de mantenerse. Y hay fórmulas para hacerlo.